La Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) expresó preocupación frente al proyecto de Reforma Laboral, que no considera las especificidades del mundo agrícola, poniendo de ejemplo la extensión de la negociación colectiva a los trabajadores de temporada, contemplada en la actual iniciativa.

“Creemos que se debe excluir expresamente a los trabajadores agrícolas de las normas de negociación colectiva que se contemplan en este proyecto y abordarlas en una iniciativa especial ¿Cómo se compatibiliza eso con los ritmos de las trabajadores agrícolas de temporada? ¿Cuántas negociaciones colectivas se van a sostener en los campos? No se está pensando en el impacto de que estas negociaciones culminen en una huelga en plena temporada”, dijo el presidente de la SNA, Patricio Crespo, en el marco de la “Jornada de Reflexión por una Reforma Laboral para todos”, organizada por más de 20 asociaciones gremiales del país.

El abogado de la SNA, Manuel Ignacio Hertz, expuso ante los presentes la postura del gremio, que ve con escepticismo el proyecto que se discute en el Congreso, ya que incluye medidas que son inaplicables para el sector agrícola, pese a que es el tercer sector que emplea a más trabajadores en el país, generando a cerca de 750 mil puestos en período peak.

Respaldando lo detallado por Hertz, el líder de la SNA agregó que “se están olvidando que la agricultura depende mucho de la naturaleza, hay una serie de factores que pueden modificar lo que se planifica, como las sequías o las heladas y por eso, los periodos de demanda de mano de obra y la jornada en que se trabaja va variando. Por eso estamos pidiendo discutir estos temas en un proyecto especial para el agro, como se estuvo haciendo en la Mesa Nacional Agrícola, donde incluso pedimos que se prohibiera la huelga durante los periodos críticos de cada rubro”.

Otro de los puntos que criticaron desde la SNA fue el riesgo que se generará para las firmas agrícolas la negociación a través de sindicatos interempresa, dado que los trabajadores no pueden hacer las mismas exigencias al dueño de una compañía que exporta grandes volúmenes que al dueño de un pequeño predio, advirtiendo que eso incluso podría llevar a la quiebra de las más pequeñas, en un sector donde el 99% son Pymes.

El presidente de la SNA, Patricio Crespo, advirtió que uno de los principales riesgos de este proyecto es que se centra en los beneficios de los sindicatos por encima de los trabajadores. Esta reforma está poniendo a los sindicatos como un fin, cuando en realidad debieran ser un medio que permita compatibilizar los intereses de los trabajadores y de la empresa”.

Finalmente, Manuel Ignacio Hertz se refirió a los aspectos que deben contemplarse en un futuro proyecto que regule las relaciones laborales en el mundo agrícola, como la mejora de las normas sobre capacitación; la generación de reglas especiales en la negociación para trabajadores agrícolas, a través de pactos colectivos por faenas; el establecimiento de la presunción de contrato indefinido para casos en que se realicen de 2 o más faenas por un período superior a los diez meses, durante un año; la anualización de las rentas para trabajadores del sector; la creación de un registro de trabajadores agrícolas y pactos colectivos; la protección del pago de saldos de remuneración; y que se admita la discontinuidad de la jornada diaria.

Fuente: Sociedad Nacional de Agricultura (SNA)