Desde la semana pasada, las precipitaciones se han dejado sentir en gran parte del territorio chileno, dejando a su paso inundaciones, anegamientos y socavones desde la Región de Antofagasta, en el norte, hasta Los Ríos en el sur. 

Según datos de la ONEMI el frente climático ha dejado más de 300 damnificados y 3 muertos.

Desde el sector agrícola algunos han recibido con alegría las lluvias, esperando que tras este frente no se presenten heladas.

En ese sentido, Lina Arrieta, presidente de la Asociación de Productores y Exportadores Agrícolas del Valle de Copiapó (APECO), habló con Portalfruticola.com sobre la situación que se vive en el norte del país, considerando que este Valle se ha visto muy afectado por el clima en lo que va del año.

“No hemos tenido ningún problema [con estas lluvias] gracias a Dios. Tuvimos nevadas en el sector alto y la cordillera lo que es muy importante porque esas son nuestras reservas de agua”, comentó.

“Lo que tenemos de reporte es que cayeron 8-10mm de agua en el sector de Los Loros, pero yo creo que el reporte oficial -en términos de agua acumulada- lo va a dar el Gobierno Regional seguramente”, añadió.

Arrieta destacó que en el sector bajo no llovió “casi nada y en el sector alto y cordillera hubo nieve, así que todos estamos muy contentos”. Asimismo, indicó que los agricultores esperan que no haya heladas ya que sería el único factor que podría complicarlos dado que casi todos los campos de parronales están en proceso de brotación.

Consultada sobre la recuperación de los cultivos, a raíz de la nieve que cayó el pasado mes de julio en el Valle de Copiapó, Arrieta indicó que el proceso va “un poco lento”.

“Todo lo que se cayó por efectos de la nieve es bastante complicado porque de las 196 hectáreas de parrones que botó la nieve, al parecer se van a poder levantar sólo 30 hectáreas, entonces eso está bastante complicado”, comentó.

“Todavía están trabajando los agricultores en ello, y lo otro que es la recuperación de canales de regadío y rehabilitación de regadío interpredial, también está un poco lento dado que estamos esperando el resultado de los bonos de la comisión nacional de riego”, declaró.

De acuerdo a Arrieta, los agricultores postularon a los fondos concursables y se mantienen a la espera de tener buenos resultados, no obstante, hizo hincapié en que no se ajustaron los plazos a la situación de emergencia.

“Eso va a tomar más tiempo del que los agricultores hubiésemos querido dado que la Comisión Nacional de Riego ha tomado los plazos para la revisión de los proyectos como si fuera una situación normal y esto era una emergencia”, declaró.

“Lamentablemente, esta ley es muy rígida -la 18.450-, y no responde a la emergencia que tenemos así que eso está un poco retrasado porque, de adjudicarnos los bonos, llegarían más o menos en diciembre, lo que de una u otra manera va a afectar más que nada a los pequeños productores que no hemos tenido los recursos para poder rehabilitar los canales por cuenta propia”, detalló.

Arrieta puntualizó que las zonas que están a la espera de los bonos representan una cantidad “considerable” con “al menos 1000 hectáreas esperando de la bonificación de riego para recuperarlas”.

Expectativas

Actualmente, el Valle de Copiapó está en pleno proceso de brotación de los parronales que no se vieron afectados por las inclemencias climáticas de este año, y los productores esperan que la situación se mantenga estable durante lo que resta de invierno.

“Uva de mesa es lo que tenemos en este momento en brotación para la próxima temporada, recuerden que somos la primera región del país que exporta a fines de noviembre, que es cuando salen las primeras cajas del Valle", dijo.

“Estamos con una brotación más o menos importante y lo que nos podría afectar mucho con pérdidas considerables sería una cantidad de frío bajo los 0°C [-4, -6°C], pero hasta el momento va todo bien con el clima, muy benigno. Esperamos que siga así y con harta acumulación de nieve en el sector alto, que es nuestra reserva de agua para la temporada y para los años venideros”, concluyó Arrieta.

Por su parte, el Ministro de Agricultura, Carlos Furche, junto a la Secretaria Ejecutiva (s) de la Comisión Nacional de Riego, Loreto Mery; y el Director Ejecutivo de Agroseguros, Camilo Navarro; presentaron un “balance positivo” de las lluvias en el sector agrícola chileno tras el temporal.

"Tenemos un balance positivo del impacto de las precipitaciones para el sector agrícola. Desde luego somos empáticos y solidarizamos con la gente que lo está pasando mal, pero lo que estamos planteando desde el sector es que las lluvias de los últimos días tienen más bien un impacto positivo que negativo", dijo.

"Según el catastro que hemos podido levantar en estos días, hay muy pocos productores afectados de manera negativa, básicamente por el viento en algunas estructuras de producción bajo plástico en la Región de Coquimbo, algo en la Región de Valparaíso y en Atacama. Son productores de subsistencia y gran parte de ellos son beneficiarios de los programas de INDAP", explicó Furche en un comunicado.

Así, detalló que las precipitaciones recargaron las napas subterráneas, lo que podría ayudar a hacer frente a la sequía que afecta a las regiones del norte del país, además de contribuir a recargar las estructuras de acumulación de agua, los embalses de mayor tamaño y los pequeños y medianos embalses que están presentes en esta región del país.

"Es esperable que en primavera cuando comiencen los deshielos, el porcentaje respecto de la capacidad de los embalses mejore significativamente, lo cual debiera asegurar que para la próxima temporada agrícola tengamos agua suficiente como para una situación de regadío más normal que la que hemos tenido en los últimos años", señaló.

Asimismo, indicó que la cantidad de nieve acumulada en algunas regiones triplicó lo equivalente a agua caída, lo que se traduciría en una perspectiva más optimista para la próxima temporada de riego, ya que los embalses estarán en una mejor condición con una mayor disponibilidad de agua.

Pese a lo anterior, Furche fue enfático al señalar que pese a lo beneficiosas que serían estas precipitaciones, aún existe déficit hídrico en algunas localidades del país respecto de lo que sería un año normal.

"La situación de sequía todavía no concluye. Probablemente si hay algunas lluvias de importancia en lo que queda del invierno eso se va a corregir, pero al día de hoy tenemos déficit en la mayor parte de las regiones del país", aseveró.

De acuerdo al Secretario de Estado, estas lluvias no han afectado el abastecimiento de frutas y verduras en los principales centros de distribución, por lo que el comportamiento de los precios estará determinado por las variables estacionales normales.

Finalmente, Furche indicó que el Ministerio está llevando a cabo un “reordenamiento” para enfrentar de mejor manera este tipo de emergencias en el sector, lo que incluiría una ampliación de las coberturas de seguros, "de manera que si hay productores que sufrieron daños a consecuencia de las precipitaciones y están cubiertos por estos seguros, podrían reclamar en los próximos días el pago de estos. Cuando ocurrieron los aluviones en Atacama, tuvimos el ejemplo de una veintena de agricultores que recibieron cantidades significativas de recursos tras el pago de sus seguros", concluyó Furche.

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