La exportadora peruana de uva de mesa, Agrícola Andrea, ha dicho que las oportunidades en el mercado de EE.UU. están mejorando para la próxima temporada debido a que la industria está teniendo un rendimiento superior al de Chile. Sin embargo, indican que las exportaciones a la Unión Europea son "inciertas", debido a la prohibición de las importaciones en Rusia. 

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El director de la compañía, Jonathan Geller, dijo en entrevista con Portalfruticola.com que la cantidad de tiempo en que los exportadores peruanos de uva eran capaces de enviar su fruta a EE.UU. estaba aumentado, ya que, en su opinión, su fruta tiene una mayor calidad que la de los productores chilenos.

"Estamos viendo un gran interés de los minoristas estadounidenses para trabajar en importantes programas de marketing cuando termine el suministro de California", dijo Geller.

"Está claro que varios productores peruanos han hecho un mejor trabajo en estas temporadas pasadas que los productores chilenos, en términos de calidad de la fruta, así como en el cumplimiento de los acuerdos, y esto nos está permitiendo incrementar lo que antes era una pequeña ventana comercial", agregó.

Geller además comentó que "contrario a la opinión de mucha gente”, Perú ha competido más fuertemente con los productores californianos -quienes ponen sus uvas en almacenamiento y las venden a finales de año- que con Chile.

La situación a través del Atlántico no es tan positiva ya que los exportadores de uva de Europa ya no tienen permitido enviar fruta a Rusia, a raíz de la prohibición de importación de productos de la Unión Europea, EE.UU., Australia, Canadá y Noruega.

"Europa nos está preocupando mucho debido al aumento de la producción previsto para esta temporada y con la prohibición rusa. Sigue siendo incierto en cuanto a dónde terminarán las cerca de 45 mil toneladas métricas que normalmente enviamos allí", dijo Geller.

La producción de Agrícola Andrea ubicada está en la región de Ica, al sur del país, y la primera cosecha debe llevarse a cabo en la semana 44, cerca de finales de octubre.

Finalmente, Geller dijo que el color y el vigor del crecimiento vegetativo son algunos de los mejores que había visto, y sus compañeros productores en la región de Ica estaban viendo una tendencia similar, la que fue causada -muy probablemente- por las altas temperaturas que la zona recibió en mayo, junio y parte de julio.

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