Según datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales de España el valor de la exportación española de frutas y hortalizas frescas fuera de Europa cayó 13.5% en 2020 con relación al año anterior, situándose en 519 millones de euros (USD 625.06 millones).

La Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas, Hortalizas, Flores y Plantas Vivas de España (Fepex) señaló que las ventas de frutas y hortalizas fuera de Europa el año pasado se ubicaron en 4% del total exportado por España que se ubicó en 14.594 millones de euros (USD 17.580 millones).

Lo anterior reflejó una caída en los principales destinos de exportación como Canadá con 79 millones de euros (USD 95.12 millones), que representó 19% menos que en 2019. Brasil solo obtuvo 56.4 millones de euros (USD 67.91) con un 43% menos.

La principal caída la representó  China con 11.2 millones de euros (USD 13.49 millones) frente a los 46.3 millones de 2019 (USD 55.75 millones), que representaron una disminución de 76%.

La exportación a países europeos no comunitarios creció un 22%, totalizando 1.092 millones de euros (USD 1.320 millones), siendo Suiza con 322 millones de euros (USD 387.80 millones) y un 25% más y Noruega, con 140 millones de euros (168. 61 millones) y 19% más los primeros destinos.

Exportaciones de la Unión Europea crecen 8%

Respecto a las exportaciones de frutas y hortalizas de la Unión Europea, Fepex señaló que el bloque totalizó en 2020 14.502 millones de euros (USD 17. 46 millones), un 8% más que en 2019, representando  92.5% del total.

Alemania y Francia se mantuvieron como los principales destinos de exportación con 4.073 millones de euros (USD 4.900 millones) en el caso de Alemania, la cifra  fue un 14% más que en 2019. Francia obtuvo 2.550 millones de euros (USD 3.070 millones), es decir  9% superior.

Pandemia afectó a las exportaciones de frutas y hortalizas de España

Las débiles cifras respecto a España fuera del mercado comunitario y europeo, dijo Fepex, se debieron a la pandemia del Covid-19 “ya que el transporte a países lejanos se complicó mucho por las restricciones y por el descenso del número de viajes, tanto en barco como en avión, lo que provocó que los días de trayecto de la mercancía aumentaran y no fuera viable la exportación”.