Los recolectores de cítricos de la Comunidad Valenciana han ratificado hoy la convocatoria de huelga indefinida a partir del próximo lunes, al no haber llegado a ningún acuerdo con la patronal, según ha informado el secretario del sector agrario de FITAG-UGT-PV, Manolo Bono. Los trabajadores han reclamado un incremento del salario a jornal y a destajo del 3% desde septiembre de este año y una vigencia del convenio colectivo de dos años, al tiempo que han advertido que, al no alcanzar un acuerdo, iniciarán una huelga indefinida a partir del próximo día 28 de noviembre

"Nosotros hemos mantenido nuestras propuestas y la patronal no ha dicho nada, no ha hecho ninguna contraoferta porque la situación le da exactamente igual, parece que no haya ningún problema", ha lamentado Bono. El secretario del sector agrario de UGT ha denunciado que la patronal está empleando a personal temporal, al que le paga un 40% menos que a los recolectores habituales y ha opinado que con esta situación las patronales "están encantadas de la vida".

Asimismo, ha lamentado que los empresarios no empleen las mesas de negociación, en las que están representados los sindicatos UGT y CC OO, para buscar alternativas a la situación y ha opinado que una huelga "es la única salida". "No se puede permitir que no haya ningún incremento salarial y que las empresas de trabajo temporal campen a sus anchas; nosotros no estamos en disposición de que esto continué así", ha concluido.

La Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA-PV) ha hecho público un comunicado en el que apoya a los trabajadores del sector de la recolección de cítricos, que en su opinión "deben tener un salario y condiciones de trabajo dignos".

Por su parte, el diputado electo de Compromís-Equo en el Congreso, Joan Baldoví, ha anunciado hoy que una de las primeras iniciativas que tomará en la Cámara Baja será "defender los intereses de los trabajadores y trabajadoras de la naranja" que, en su opinión, "están sufriendo una explotación brutal por parte de las empresas de trabajo temporal (ETT) en todo el territorio valenciano".

Baldoví ha avanzado que planteará una serie de iniciativas "para que las inspecciones de trabajo persigan e impongan fuertes sanciones a las empresas que están explotando" a los recolectores. Ha apuntado que estos "cobran ocho euros por diez horas de trabajo".

Compromís ha explicado que se ha detectado que "muchos almacenes de naranjas de la Ribera, el Camp de Morvedre o la Safor, entre otras comarcas de tradición citrícola, han optado por derivar la contratación" de recolectores y de personal de almacén a empresas de trabajo temporal. La coalición ha denunciado que estas empresas "están pagando salarios muy bajos y sin justificar".

A este respecto, el portavoz de agricultura de la coalición en las Cortes Valencianes, Josep Maria Pañella, ha asegurado que se coordinará con Baldoví con el fin de "presentar iniciativas para que las administraciones actúen con contundencia, según sus competencias, para acabar con estas prácticas que tocan la esclavitud", ha destacado la coalición.

Fuente: El País