La demanda de uvas de mesa de Perú fue fuerte hasta hace poco, beneficiándose de una salida temprana de la fruta de California y una llegada tardía de las uvas de mesa de Chile.
"Tener una presencia fuerte en Chile es una parte integral en nuestra estrategia de crecimiento por lo cual estamos encantados de que Subsole ahora sea parte de nuestra cartera", dijo David Krause, CEO de Frutura.
El cambio de variedades ha dado lugar a una mayor difusión de la temporada, que se espera que se prolongue más allá de la festividad del 4 de julio en Estados Unidos.
El informe añadió que, a pesar de las turbulencias de los dos últimos años, China sigue siendo un mercado fuerte para los productores locales.
La menor disponibilidad de naves para la exportación de fruta fresca en el Puerto de Valparaíso está generando el problema, justo en el peak de la campaña.
Hasta la séptima semana, las exportaciones totales ascendían a 45,7 millones de cajas, frente a los 45,9 millones exportados en la misma época del año pasado, según datos de la asociación de la industria sudafricana de uva de mesa (SATI).
El país ha empacado más de 7 millones de cajas más año tras año, pero ha enviado 4,9 millones de cajas menos a los mercados internacionales.
Según la entidad esta será la primera campaña que Perú superaría los sesenta millones de cajas de uva de mesa que exportaría al mundo.
Los retrasos en el Puerto de Ciudad del Cabo siguen siendo un desafío, y la situación muestra cierta mejora, aunque todavía demasiado lenta dadas las semanas peak de envío que aún quedan por delante.
El presidente de la consultora Inform@cción, Fernando Cillóniz Benavides comentó que “al cierre de la presente campaña (octubre 2021/marzo 2022) los despachos de uva de mesa estarían entre los USD 1.300 millones y USD 1.400 millones".