Consejo técnico: Cómo detectar la pudrición radical y del cuello en nogal

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Consejo técnico: Cómo detectar la pudrición radical y del cuello en nogal

Por Andrea Torres Pinto, Ingeniero Agrónomo INIA La Cruz

La Pudrición radical y del cuello en nogal es la principal enfermedad de los nogales en Chile, siendo los organismos causales un conjunto de especies de hongos pertenecientes al género Phytophthora.

Sintomatología

Limitación de tejido sano y enfermo

El síntoma más característico se presenta a nivel del tronco, bajo la superficie del suelo, donde se observan cancros formados por tejidos descompuestos de color marrón intenso y de consistencia húmeda que comprometen el cuello y la corona.

Los árboles enfermos decaen en crecimiento, el follaje se torna más pálido y presenta una coloración otoñal anticipada.

Condiciones predisponentes

La pudrición del cuello se ve favorecido por el exceso de humedad en la base del tronco.

Al ser un habitante del suelo persistente, puede mantenerse en este por largos períodos con ausencia de plantas huéspedes.

La dispersión se realiza en otoño cuando el terreno está húmedo y la temperatura fría.

La dispersión a distancia ocurre a través del agua o tierra transportada por herramientas de cultivo y la comercialización de plantas de vivero infectadas.

Medidas de control

Se deben evitar los factores que favorezcan el desarrollo de la enfermedad, como por ejemplo:

  1. Evitar que el agua de riego toque directamente la base del tronco o la corona de los árboles.
  2. Establecer su huerto sobre suelos sin napas freáticas superficiales.
  3. Evitar terrenos donde exista acumulación de agua superficial.
  4. Plantar en camellones o platabandas, con el objetivo de mejorar el drenaje.
  5. El injerto no debe quedar en contacto con el suelo.
  6. Evite plantar en suelos de textura arcillosa.
  7. Manejar adecuadamente su sistema de riego.
  8. Controlar la humedad excesiva del suelo.
  9. Evitar anegamientos.
  10. Controlar malezas alrededor del tronco ya que éstas mantienen humedad.
  11. No provocar heridas en el tronco y cuello.

Otras medidas

  • Utilizar patrones más resistentes; los clonales han mostrado ser más susceptibles a la enfermedad.
  • Arrancar los árboles afectados y elimínelos de las cercanías del huerto.
  • Evitar replantación.

­Al observar síntomas son incipientes en un árbol (menor vigor y hojas de color amarillo), se recomienda descalzar el cuello y raíces, de modo que el tejido dañado se seque.

Control químico

Recuerde: El éxito de las aplicaciones depende de la oportunidad en que se efectúe, el producto que utilice y la calidad de la aplicación (equipos regulados y calibrados).

www.portalfruticola.com

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