Tendrá un impacto positivo en la industria frutícola chilena

Un innovador sistema de riego, que considera la instalación de sensores que midan directamente en la planta el estrés hídrico y en forma continua durante toda la temporada productiva, está siendo implementado por las empresas DreamLine y Wisenconn en Chile, reportó la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) del Ministerio de Agricultura de Chile.

Fotografía: FIA

La implementación de este sistema impactará positivamente en la eficiencia en el uso del agua, la productividad y la calidad de la producción de la industria frutícola. También optimizará el manejo del riego.

La entidad señaló que la iniciativa cobra vital relevancia en el escenario de déficit de agua que afecta a Chile desde hace tres años. De acuerdo a cifras de la Comisión Nacional de Riego (CNR), 129 comunas del país fueron declaradas Zona de Emergencia Agrícola, de las cuales 108 registran déficit hídrico.

Actualmente la detección de estrés hídrico se realiza principalmente en forma directa, sobre la base de mediciones de contenido y potencial del agua en el suelo a través de estimaciones de la evapotranspiración de los cultivos.

“Solo para algunas especies se han desarrollado técnicas de medición del potencial hídrico en diferentes órganos de la planta, pero todas estas técnicas se realizan esporádicamente y no dan cuenta del estatus hídrico de la planta en tiempo real, por lo cual sus implicaciones son limitadas”, explicó Cristóbal Rivas, coordinador de la iniciativa.

FIA detalló que el objetivo final es obtener una versión comercial de sensores para la detección de señales eléctricas en plantas frutales que representen condiciones de disponibilidad hídrica, los cuales se integrarán con un sistema de telemetría, obteniendo una forma de visualización e interpretación a través de un software especializado, para el proceso de toma de decisiones optimas de riego por parte de los agricultores.

“La información que se obtenga, permitirá detectar situaciones de estrés hídrico temprano y realizar una operación programada y/o automatizada de los sistemas de riego tecnificado. Así se mejorará el uso de agua y energía y la calidad de las frutas destinadas a los mercados de exportación”, explicó Maurice Streit, ejecutivo de innovación de FIA y supervisor de la iniciativa.

El proyecto además realizará la investigación necesaria para evaluar y calibrar la respuesta de plantaciones frutales manejadas con diferentes estrategias de riego, por medio del equipamiento electrónico producido y en adaptar sistemas computacionales de procesamiento de datos.

La iniciativa también incluye la definición e implementación de un servicio de apoyo agronómico para los productores frutícolas, que les permita implementar adecuadamente las prestaciones de los productos del proyecto.

Actualmente, se desarrolla la etapa de prueba de diversas alternativas en los sensores, previéndose contar, antes de octubre, con el primer prototipo 100% funcional tanto de electrodos como de electrónica de adaptación. Éste será instalado en un campo de la Región del Maule, informó FIA.

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