El área cultivada con productos orgánicos certificados disminuyó entre el 2006 y el 2009, pese a la entrada en vigencia de la Ley para el desarrollo, promoción y fomento de la actividad agropecuaria orgánica en el país.

La caída desde las 10.711 hectáreas certificadas a 8.052 hectáreas es reportada por el programa de Acreditación y Registro en Agricultura Orgánica (ARAO).

Esta merma afecta en especial productos destinados a mercados externos, pero también la producción para consumo interno.

La ley, emitida en setiembre del 2006, permite la exoneración del impuesto sobre la renta por 10 años, la eliminación de tributos a los insumos y del impuesto de ventas, pero exige la certificación para optar por esos beneficios legales.

Las organizaciones de agricultores orgánicos también pueden importar, sin pagar impuestos, carros tipopick/up.

La normativa permitía dar un impulso definitivo a este tipo de producción en el país, pero igualmente había que crear un mercado para productos que en varias épocas del año tienen precios mayores que los convencionales.

Las organizaciones de agricultores orgánicos reconocen este precio superior, pero dicen que el valor se mantiene muy estable durante todo el año. En eso se diferencian de los convencionales, que presentan muchas fluctuaciones de precio porque la producción también fluctúa bastante.

La agricultura orgánica en Costa Rica ofrece azúcar, dulce, café, frijoles, tomate de mesa, tomate cherry, chile dulce, lechuga, coles (repollo y otras), apio y muchas otras hortalizas.

Entre las frutas están los aguacates criollos, los cítricos (naranjas y limones), papaya y otras.

Los agricultores también producen de manera orgánica las musáceas (banano, plátano, guineos), raíces y tubérculos y algunos granos como el frijol tierno.

Algunas de las organizaciones de agricultores ya entraron en una primera etapa de agroindustria y venden chileras orgánicas, mermeladas y una especie parecida a la semillas de almendra, detalló Rafael Mena, gerente del Programa Nacional de Agricultura Orgánica del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).

Los agricultores que se dedican a los cultivos orgánicos no utilizan productos químicos en las plantaciones.

Fuente: La Nación